martes, 14 de febrero de 2017

Manipulación de los colores de la luz: ¡la foto que parecía perdida!

Últimamente estoy investigando mucho por mi programa de edición de fotografías (Lightroom) y tocando muchos ajustes para aprender un poco más. Una de mis últimas fotos en instagram sembraron dudas por el truco de iluminación que hice. Dicho truco lo podéis apreciar en la siguiente foto. Hoy vengo a explicaros cómo retoqué esta foto para manipular el color del ventanal.
¡Bienvenidos a mi blog!


Me encanta tocar y cambiar los colores de una foto y esto se hace fácil tocando un programa como Lightroom o el Camera Raw de Adobe Photoshop. Pero no sabía que podía llegar tan lejos en la manipulación así que os contaré cómo surgió esta foto, su problema y mi solución. Salí para hacerme una sesión de fotos donde yo sería el modelo y nos quedaron cosas muy chulas. Cayendo la tarde, se me ocurrió la idea de ir a un sitio donde había luces fosforescentes que me molaban. Pensé que en la oscuridad, podríamos usar dicha iluminación para iluminar mi rostro y que quedara del estilo de la foto que subí. La cosa parecía correcta ya que todo estaba bien calculado. Tenía mi trípode y mi cámara. Solo era cuestión de abrir mucho diafragma y utilizar una velocidad corta. Pero entonces, me topé con el gran problema. 
Al llegar al lugar todo estaba como pensaba. Las luces eran geniales y el color que atravesaba el cristal era fantástico. Si alguno sois de Sevilla o incluso de fuera, el lugar era el Tommy Mel´s. Lo podéis ver en la foto que sale aquí al lado. Pues bien, el ventanal perfecto que elegimos dio la casualidad que estaba debajo de un gran foco que se ilumina por la noche y cortaba toda la magia de mi fotografía. El resultado es como véis. Un poco de violeta del ventanal y toda mi cara blanca iluminada por dicho foco. Creí que perdía la imagen, pero Lightroom la salvó. Vamos a explicarlo.

Esta explicación vale tanto para Camera Raw como Lightroom. Lo primero que hice fue bajar la exposición y ya así perdía un poco de luz blanca. Le baje las altas luces y las sombras para que fuera más oscura. Esto es más o menos normal pero ahora viene lo mejor. No toqué las curvas pero en la parte de tonos/saturación le aumente el magenta. Esto causó un mayor tono de magenta en la imagen y, como la imagen recibe el magenta como iluminación ya que era luz del ventanal, empezó a notarse en mi cara. Pero aún no era suficiente aunque ya no había casi nada de blanco. Lo único con lo que jugué fue con la herramienta degradado. Así que la coloqué en vertical desde la parte derecha de la foto hasta un poco más de la mitad de mi cuerpo, y empecé a tocar. Le bajé un poco la exposición para que fuera más real, ya que, la parte derecha de la imagen no está iluminada por el ventanal así que tiene que estar oscura. Y luego, en la parte matiz, aumenté el magenta de la imagen. Cada uno puede ahí jugar como quiera e incluso seguro que hay mil formas más de hacerlo y que os quede algo como mi foto, pero a mi me funcionó. Luego probé a cambiar el magenta por azul y molaba, pero prefería el magenta. Para cambiar así el color simplemente volvemos a la parte de los colores en Tonos, y movemos la barra de la magenta hacia donde queramos. La funcionalidad de los colores es compleja y quizás si os interesa podría contarla en otro post.

Espero que os haya servido mi experiencia con esta foto ya que me encantó el resultado, aunque al principio parecía una foto perdida. Por eso no podéis borrar ninguna de vuestras fotos en sesiones hasta llegar a Lightroom, a no ser que sea un completo desastre. Si os molan estos post solo decídmelo y seguiré contando lo que voy descubriendo ya que soy tan principiante como vosotros.
Y como ya sabéis... ¡Siempre sois bienvenidos a comentar!


😙 Facebook: christian cañas barrientos
😉Twitter: @designersuelto
😎 Instagram: christiancabar
😝 Flickr: christiancabar






Share:

0 comentarios:

Publicar un comentario